La custodia agraria en nuestro país cuenta con experiencias muy interesantes de acuerdos de custodia con ganaderos extensivos y desde la Plataforma de Custodia del Territorio de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, queremos conocer la opinión de Alberto Navarro, en su doble faceta de ganadero extensivo y de técnico experto en custodia del territorio.
Plataforma (P): ¿Cuál crees que puede ser la función de la custodia del territorio para favorecer la ganadería extensiva?
Alberto Navarro (AN.): Desde mi punto de vista hay dos aspectos destacables. El primero es que resulta muy importante poner en valor aquellos aspectos que participan directamente en la conservación de la naturaleza a través de la actividad ganadera, traer a la luz cómo esta actividad agraria tiene una implicación directa en la conservación. Y el segundo, es cómo el movimiento de custodia puede desarrollar modelos de gestión que mejoren la actividad de la ganadería extensiva, a la vez que contribuyen a la conservación de la naturaleza. El movimiento de custodia del territorio y el sector de la ganadería extensiva tienen muchos puntos de encuentro hablando de conservación del patrimonio natural y cultural.
P.:¿Cuál crees que es la relación entre el sector de la ganadería extensiva y el de la conservación?
AN.: Hay muchas cosas en común, hay más puntos de encuentro que de desencuentro. El mayor conflicto aparece quizás con el tema de los depredadores (lobo, por ejemplo), pero hay que trabajar por la coexistencia. Y en este sentido, desde el punto de vista conservacionista se trataría de reducir los factores que afectan a la vulnerabilidad de las presas (el ganado), antes que trabajar la densidad de los depredadores. Es necesario trabajar en una buena combinación de herramientas y prácticas de protección del ganado frente a los depredadores.
P.: ¿Qué puede aportar el sector conservacionista en la gestión de las explotaciones ganaderas extensivas?
AN.: Puede mejorar la eficiencia y la eficacia en el uso de los recursos naturales, humanos y energéticos. Se puede profundizar en aspectos de gestión que se hayan perdido o que hayan desaparecido de una determinada zona y que estaban íntimamente relacionados con la conservación y mantenimiento del territorio y sus valores.
P.: ¿Qué otras actuaciones, no tan directamente relacionadas con la conservación sino más bien con el mantenimiento de la actividad, podría desarrollar la custodia del territorio con la ganadería?
AN.: El tejido asociativo y la experiencia que en este sentido tiene el sector de la conservación, puede ayudar al sector de la ganadería extensiva a agruparse. Es una de nuestras grandes debilidades. Y para la ganadería extensiva sería importante contar con la red de contactos y colaboradores con la que cuenta la custodia del territorio en España. Por otro lado, puede ayudar mucho al sector ganadero la experiencia del mercado de productos de custodia del territorio, para revalorizar sus productos y trasladar a la sociedad toda esa labor de conservación de la que hablaba antes. Podría incluso ser posible diferenciar la ganadería intensiva de la extensiva, a través de una marca relacionada con la custodia del territorio y con los productos que salen de ella.
P.: ¿Y qué le pedirías como ganadero al movimiento de custodia del territorio?
AN.: Sobre todo que ponga en conocimiento de la sociedad la labor que desarrolla la ganadería extensiva para la protección y conservación de mucho patrimonio público (natural y cultural), labor que, por lo general, se desconoce. Se informa sin diferenciar la ganadería extensiva de la ganadería intensiva; ni siquiera en el censo agrario hay una diferenciación entre explotaciones ganaderas con el ganado estabulado y ganaderías extensivas donde el ganado pasta libremente la mayor parte del tiempo.